Un toque personal lleva a una familia de Houston a la línea de meta de recuperación

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TRO-NR-24
Release Date:
agosto 13, 2018

Historia de una sobreviviente: Un año después del huracán Harvey

 

AUSTIN, Texas – Rose Pickens sabía más sobre inundaciones y asistencia federal por desastre que la mayoría de las personas cuando azotó el huracán Harvey. Había recibido ayuda de la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA, por sus siglas en inglés) después de que su vivienda sufriera daños en la inundación del Día de Conmemoración a los Caídos de 2016, y a través de su función de directora de una organización local sin fines de lucro, había brindado asistencia a muchas familias pobres, cuyas viviendas se habían inundado.

 

Sin embargo, el camino de recuperación de su familia después de Harvey fue lento y desalentador.

 

“Muchas personas creen que es una corrida rápida, que se logra velozmente, pero en realidad se vuelve una maratón” contó. “Estaba comenzando a perder las esperanzas”.

 

Un toque personal puede logar una gran diferencia para alguien en el lugar de Pickens, y ese toque lo dio Christa López de la Oficina General de Terrenos de Texas.

 

“Parecía que todo lo que pensábamos que iba a suceder fracasaba, y me estaba desesperando un poco”, dijo Pickens a López en junio. “Pudiste rescatarnos. Fue una bendición increíble, más de lo que podía imaginar o pensar”.

 

López había trabajado junto con Pickens durante más de dos meses para encontrar una solución de viviendas, mientras Rose, su esposo y sus tres hijos se preparaban para elevar su hogar. El trabajo, que estaba programado para comenzar en junio, se esperaba que tardara entre 3 y 6 meses.

 

Sin embargo, la tarea de elevar la propiedad no pudo comenzar hasta que lograron encontrar un lugar para vivir temporalmente. Ese lugar llegó en marzo, gracias a los esfuerzos incansables de López. 

 

“Estaba sentada aquí y comencé a ver como el vehículo recreativo aparecía por la calle”, recordó Pickens. “Cuando me di cuenta que era para nosotros, comencé a llorar y comencé a alabar a Dios porque había esperanza.

 

“Inmediatamente la llamé [López] y le dije: ‘Muchas gracias por todo lo que has hecho por mí y mi familia’”, dijo Pickens. “Pero sé que no se trata de algo especial: Haces esto por todas las personas que llegan a tu escritorio”.

 

El vehículo recreativo (RV, por sus siglas en inglés) fue la segunda vivienda temporaria de la familia desde que Harvey inundara el hogar con 3 pies de agua en agosto de 2017. Desde septiembre hasta noviembre, vivieron en un hotel hasta que la vivienda estuviera en condiciones habitables, incluido el remplazo de todos los pisos.

 

Una vez que se elevó completamente la vivienda, los Pickens se mudaron, sabiendo que habían hecho todo lo posible para protegerse a sí mismos de futuras inundaciones.

 

“Esta barra me dice que mi vivienda no se inundará nuevamente” dijo Pickens señalando una pieza de equipamiento que se utilizará para elevar su hogar “y si sucede, la ciudad completa de Rosenberg quedará bajo el agua”.

 

El hogar de los Pickens ya estaba a 4 pies del piso en el patio trasero y 2 en el frente. Para elevarla por encima del nivel de inundación —el nivel donde se estiman las probabilidades de las inundaciones es de 1 en 100 en cualquier año determinado— solo necesitarían elevarla otros 2.5 pies, pero en su lugar podrán elevarla en unos 8 pies adicionales. Eso les permitirá utilizar el espacio debajo, y les proporcionará tranquilidad en un lugar que ya ha desafiado las probabilidades cuando se trata de inundaciones.

 

“Nunca piensas que algo como la inundación del Día de Conmemoración a los Caídos puede suceder, y luego sucede, y dices: ‘Seguro que no vuelve a ocurrir de nuevo’”, agregó Pickens. “Las noticias continuaron diciendo con sarcasmo que el 2016 fue el año 100 de inundaciones y es como, ‘Guau en 15 meses sucederá de nuevo’. Eso asusta bastante”.

 

Pickens y su grupo sin fines de lucro Friends of North Rosenberg, que forman parte del grupo mundial Attack Poverty, han estado restaurando las viviendas dañadas por las inundaciones desde el Día de Conmemoración a los Caídos de 2016. No solo Friends of North Rosenberg cuentan con voluntarios locales, sino que además Pickens ha organizado a otras 2,400 personas de 30 estados, que han viajado a Rosenberg a colaborar desde la llegada de Harvey.

 

Además de la “retirada de escombros y demolición” y de la reparación de las viviendas inundadas, la organización está en el proceso de elevar seis propiedades, mientras que planifica realizar otras 15 elevaciones más. Los voluntarios también brindaron terapia para el manejo del estrés, talleres de preparación y muchos otros recursos para los miembros empobrecidos de Rosenberg.

 

“Muchas familias… perdieron todo en un segundo [durante Harvey]”, dijo Pickens. “A medida que la comunidad comenzó a recuperarse, un espíritu de resiliencia se creó en el lugar. … Al estar en la pobreza, se aprende de algún modo de qué manera atravesar y lidiar con ciertas cosas que suceden en la vida, y lamentablemente este es uno de esos momentos”.

 

Para obtener información adicional acerca de la recuperación del huracán Harvey y de Texas, visite la página web del desastre ocasionado por el huracán Harvey en www.fema.gov/es/disaster/4332, o en Facebook en www.facebook.com/FEMAharvey, la cuenta de Twitter de FEMA Region 6 en www.twitter.com/FEMARegion6, o el sitio web de la División de Texas para el Manejo de Emergencias en https://www.dps.texas.gov/dem/.

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